6 may. 2021
Imágenes de terror y desesperación en Colombia colman los medios de comunicación y las redes sociales. Una de las escenas que más ha conmocionado es la de un helicóptero sobrevolando a unos 15 metros del suelo y disparando contra los manifestantes en la ciudad de Buga en el departamento de Valle del Cauca.
También llaman la atención las cifras de fallecidos, fijada en 31 por el Instituto de estudios para el desarrollo y la paz (Indepaz), y la mayoría de ellos a manos del Escuadrón Móvil Antidisturbios de la Policía Nacional (Esmad). El informe de Indepaz precisa, además, que aún son investigados los supuestos homicidios de otros dos hombres y una mujer, mientras estima en más de 1 200 la cantidad de heridos, 87 desaparecidos y 18 personas con daños en sus ojos como resultado de la violencia policial.
Este miércoles 5 de mayo, octavo día de protestas, avanzaron las movilizaciones del paro nacional convocado en diferentes puntos del país para protestar, en esta ocasión, contra la reforma de salud, el abuso de la Fuerza Pública, entre otras peticiones, de acuerdo con el diario colombiano El Espectador.
A esta situación se suma la preocupación por la posible declaratoria del estado de conmoción interior, una figura contemplada en el artículo 213 de la Constitución, a la que acuden los presidentes cuando la situación de orden público en el territorio se sale de control. De aprobarse, permitiría al presidente Iván Duque suspender cargos de gobernantes regionales, restringir las manifestaciones sociales, asumir el control de la radio y la televisión durante un periodo máximo de 90 días, además de que admitiría que la fuerza pública realizara inspecciones a domicilios sin necesidad de una orden judicial previa.
«La semana negra del uribismo encarnado en Duque», así define estos días convulsos El Espectador.
La manifestaciones suceden en casi todas las ciudades del país. En Cali se desarrolló un velatorio en honor a los muertos durante el paro. En Medellín, varios usuarios reportan la llegada de miembros de la fuerza pública y una tanqueta antidisturbios, y quitaron el alumbrado público.
Asimismo en Pasto, en el departamento de Nariño, el Esmad dispersó a los manifestantes con gases lacrimógenos y bombas aturdidoras. En el caso de Cartagena, la jornada de manifestación transcurrió sin alteraciones del orden público.
Cientos de personas se movilizan de forma pacífica en Bucaramanga, y en esta región preocupa el acceso de oxígeno al departamento por los bloqueos en las vías. En Barranquilla ocurrió un encuentro entre los manifestantes y el Esmad. Durante una transmisión en vivo se registró cómo un joven convulsionaba tras ser impactado por un chorro de agua que arrojó una tanqueta antidisturbios.
¿QUÉ DICEN EN EL MUNDO?
La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, expresó su preocupación por la vulneración de derechos humanos en ciudades como Cali. «Expresamos nuestra solidaridad con aquellos que han perdido sus vidas, o han sido heridos, así como con sus familias», manifestó.
La Organización No Gubernamental Save the Children también expresó su preocupación e indignación por los actos violentos ocurridos, donde se ven involucrados y afectados niños, niñas y adolescentes junto con sus familias.
Asimismo, 10 000 profesores colombianos solicitan a las Fuerzas Militares y a la Policía Nacional parar de manera inmediata la violencia y que los responsables de los crímenes cometidos sobre la población civil sean investigados y sancionados.
Tomado de Granma