El golpe de Estado perpetrado en Chile contra el gobierno de Salvador Allende constituye una de las páginas más tristes y oscuras de la historia latinoamericana.

Este año se cumplen 50 años del bombardeo a La Moneda, de la muerte de Salvador Allende y del asesinato de cientos de chilenos y chilenas. Por eso, desde las páginas de Contexto Latinoamericano queremos traer la mirada hacia tres libros de la editorial Ocean Sur: Chile. El otro 11 de septiembre, Fascismos paralelos. El golpe de Estado en Chile, y La conspiración contra Allende.   

El primero es una antología acerca del golpe de Estado. Contiene una introducción, a cargo de los editores Pilar Aguilera y Ricardo Fredes, un conmovedor ensayo de Ariel Dorfman, las últimas palabras pronunciadas por el presidente Salvador Allende y el recuento de los momentos finales del músico Víctor Jara, relatado por su viuda Joan Jara. Otros dos textos resultan estremecedores: los versos Sepan lo sepan lo sepan —de Pablo Neruda— y el testimonio en poesía del propio Víctor Jara, mientras se encuentra prisionero en el Estadio de Chile, momentos antes de ser brutalmente asesinado. Entre otros, conforman este volumen las palabras de Beatriz Allende, hija del presidente, y el discurso que pronunciara el Comandante en Jefe Fidel Castro, el 28 de septiembre de 1973.

Así dijo el líder de la Revolución Cubana:

El presidente no solo fue valiente y firme en cumplir su palabra de morir defendiendo la causa del pueblo, sino que se creció en la hora decisiva hasta límites increíbles. La presencia de ánimo, la serenidad, el dinamismo, la capacidad de mando y el heroísmo que demostró, fueron admirables. Nunca en este continente ningún presidente protagonizó tan dramática hazaña. Muchas veces el pensamiento inerme quedó abatido por la fuerza bruta. Pero ahora puede decirse que nunca la fuerza bruta conoció semejante resistencia, realizada en el terreno militar por un hombre de ideas, cuyas armas fueron siempre la palabra y la pluma.

Salvador Allende demostró más dignidad, más honor, más valor y más heroísmo que todos los militares fascistas juntos. Su gesto de grandeza incomparable, hundió para siempre en la ignominia a Pinochet y sus cómplices…

Por su parte, el libro Fascismos paralelos. El golpe de Estado en Chile, comprende un conjunto de relatos, discursos y evidencia jurídica que narran los sangrientos hechos acaecidos el 11 de septiembre, y que iniciarían la escalada de violencia que dio inicio a la dictadura pinochetista.

Su autor, el periodista, poeta y escritor argentino Jorge Timossi, fue corresponsal de la agencia de noticias Prensa Latina durante los tres años del gobierno de la Unidad Popular en Chile, y testimonió sobre el golpe de Estado fascista de 1973 en ese país.

Entre los documentos presentados destaca el conjunto de actas e informes elaborados por la Subcomisión Jurídica de la Comisión Investigadora de los Crímenes de la Junta Militar que —bajo el título «El fraude jurídico del estado de guerra y la represión judicial y extrajudicial en Chile»— evidencia y argumenta las violaciones y atropellos que en el orden jurídico protagonizó la dictadura.

El volumen establece un paralelo con el intento de golpe de Estado de abril de 2002 contra Hugo Chávez en Venezuela, realizado bajo la sombra de George W. Bush. Reúne palabras de Fidel Castro, Salvador Allende, Beatriz Allende, Gregorio Selser, Isabel Jaramillo, Lisandro Otero y del propio Timossi.

Como parte del relato de Lisandro Otero, destaca la crónica que escribió el corresponsal de Reuters, Stewart Russell, a raíz de su participación en los sucesos de aquel septiembre:

Agachándome, caminé media cuadra hasta el hotel Crillón. La calle estaba sembrada de cápsulas vacías y balas de todo tipo y cubierta de astillas de los vidrios destrozados de ventanas y escaparates. En el hotel montamos un cuarto de redacción con otros corresponsales, sabiendo que muy poco de lo que escribiésemos llegaría al exterior debido al corte total de comunicaciones. Al caer la noche se reanudaron los problemas. Un grupo de soldados confundió quizás el tableteo de nuestras máquinas de escribir con disparos de armas livianas y abrieron fuego contra el frente del hotel de cinco pisos. Nos zambullimos por la puerta del dormitorio, abierta por fortuna, hacia el pasillo. Durante unos minutos el hotel se estremeció con los impactos y luego se escucharon disparos a ambos lados del edificio. Después ingresó el pelotón de policías militares con uniformes verdes, cascos y pañuelos rojos al cuello. (…) Apresaron a mi colega uruguayo, Hugo Infantino, y a mí, bajo sospecha de ser francotiradores. Nos condujeron a una galería comercial cercana convertida en puesto militar donde estuvimos de pie durante dos horas, las manos cruzadas sobre la nuca, de cara a la pared. Un camión abierto del Ejército nos condujo más tarde hasta el Ministerio de Defensa, pasando ante los escombros humeantes de La Moneda. Allí fuimos interrogados una y otra vez, a lo largo de dos horas, por varios oficiales.

Su testimonio es uno de los tantos que aparece en esta compilación y que ilustra las terribles horas de aquel día fatídico, y la crueldad de una dictadura que sería la responsable de cientos de miles de desaparecidos y otro gran número de asesinatos contabilizados y admitidos por los milicos de Pinochet.

La tercera obra que traemos a debate, no es otra que La conspiración contra Allende —de Juan Jorge Faundes—. El libro comparte una entrevista al periodista Manuel Cabieses, quien fue prisionero de guerra en Chile. Según sus propias anécdotas, estuvo diez años pasando desapercibido durante la dictadura y militando en la resistencia como dirigente del Movimiento de Izquierda Revolucionario (MIR). El texto complementa el testimonio con una selección de artículos publicados en 1973 en la revista Punto Final, de la cual Cabieses fue redactor y director, y que circuló, además, con la intención de reforzar el alma antifascista de los pueblos de Latinoamérica.   

Cabieses explica en qué momento comienza el golpe de Estado y habla sobre la tensión que vivía el pueblo chileno durante esos días pues señala que: «sabíamos que vendría el golpe, pero no cuándo ni cómo… ni que era un golpe militar». El hecho comenzó con el bombardeo a La Moneda por los militares o carabineros, como son conocidos en Chile.  Los testimonios del periodista no solo se reducen a los sucesos de guerra, sino que incluye opiniones sobre el manejo periodístico de la información y las especulaciones sobre el inicio de la conspiración en la Casa Blanca.

Lo expuesto por Manuel Cabieses en la primera parte del libro se corrobora con el resumen de textos que siguen a la entrevista, en los que se advierte el advenimiento de un golpe. Asimismo, en la mayoría de los artículos del propio Cabieses, se llama a la unión revolucionaria de los explotados y a continuar la lucha por el socialismo; se incluyen «lecciones» de marxismo-leninismo y referencias al materialismo dialéctico como enseñanzas para la construcción del socialismo en Chile y se explica cómo, aun cuando este proceso ha sido particular en dicho país, cumple con las bases de todas las revoluciones. De esta manera, se convierte en una excelente guía del proceso revolucionario en Chile durante la época mencionada con testimonios verídicos sobre dichos sucesos.

Tres libros que nos acercan a una fecha. Tres libros que recomendamos volver a leer para que nunca quede en el olvido todo lo que sufrió el pueblo chileno.

Y para poner punto final a estas líneas, dejemos que sea Mario Benedetti quien llene este espacio, con su poesía.

Para matar al hombre de la paz,
para golpear su frente limpia de pesadillas
tuvieron que convertirse en pesadilla,
para vencer al hombre de la paz
tuvieron que afiliarse siempre a la muerte
matar y matar más para seguir matando
y condenarse a la blindada soledad,
para matar al hombre que era un pueblo
tuvieron que quedarse sin el pueblo.