El libro ¿Por qué soy chavista? Razones de una revolución —de Francisco Sesto bajo el sello editorial de Ocean Sur— es un texto en el que su autor da cuentas de su convicción por el proceso revolucionario venezolano.
En la primera parte del libro, titulada con la misma interrogante que da nombre al texto, Sesto incluye una carta a una amiga donde expone detalladamente su compromiso político. Como segundo texto presenta un escrito, a raíz de la lectura de un periódico que conspira desde la oposición y donde reafirma sus convicciones y expone, de manera general, los motivos por los que no forma parte de dichos opositores. Por último, nos encontramos un texto reeditado por él mismo acerca de los principios que alientan a continuar en el proceso.
Sesto refiere en su carta el motivo principal de su lucha:
Veo mucha infelicidad innecesaria. Y no me refiero a la que se deriva del hecho mismo de la existencia, con sus contradicciones y sus dificultades, sino a la que crece y se alimenta de la oscuridad social que es un producto genuinamente humano. Veo mucho dolor, soledad, abandono, malevolencia, crueldad que son amasados con la harina de las relaciones humanas[1].
Más adelante refiere:
«Y, aquí, junto a la necesidad del cambio, es donde comienza a delinearse el augurio de ese mismo cambio, al cual o me adscribo y en el cúal hay que confiar, porque ¿sobre qué bases morales aceptar lo que se nos venía imponiendo desde un poder absoluamenre ajeno a ningún sueño que valga la pena? (…) Te invito a venir conmigo a los barrios, a las urbanizaciones populares, a recorrer los pueblos del interior, para que veas instalada en la mirada de la mayoría una luz de esperanza (…)»[2].
Así, a lo largo de la carta expone y justifica sus razones para apoyar el movimiento chavista, abogando por una mirada más atenta y realista a la situación del país, llamando la atención sobre la manipulación de la información y resaltando la eficaz labor de Hugo Chávez ante la defensa de los derechos de todo tipo del ciudadano venezolano. Como parte de la lectura encontramos el breve texto «Un día cualquiera»; en él propone con firmeza:
«Que soy chavista y que lo sería aunque estuviera solo en esto. Porque he sido chavista toda la vida, aun antes de conocer al Presidente. Porque no me importa sumergirme en el río de la gente y nadar en él. Y eso es ser chavista. Porque no me afecta estar en minoría, cuando creo estar en lo correcto y eso es ser chavista. Porque no me pueden comprar con nada, absolutamente con nada, y eso es ser chavista en esta etapa, en Venezuela. Porque trato de utilizar la capacidad de pensar no para dilucidad las verdades aparentes, sino las verdades profundas. Y eso es ser chavista»[3].
En la segunda parte incluye una entrevista del momento en que se desempeñaba como ministro de Cultura de Venezuela, en la que dialoga sobre la política cultural de Venezuela:
Ante todo, la cultura se pone al servicio de la idea central de esta Revolución, que es acabar con la pobreza material y espiritual y crear una sociedad de libertad y de justicia. No entendemos la libertad sin la justicia, por cierto, y en el fondo pensamos que toda revolución lo que intenta es crear un proceso irreversible de cambio en las relaciones humanas.[4]
La tercera parte incluye el Pasaporte cultural, realizado por la Delegación Bolivariana como obsequio a cada visitante en la Feria Internacional del Libro de La Habana en febrero de 2006 donde fue Venezuela, el país invitado de honor. Así, se incluye el mensaje que Farruco Sesto escribió para ese pequeño documento. Leamos el final del breve escrito que se adjtunta en el libro donde Sesto se remite al sentimiento de unidad latinoamericana:
Donde quiera que llegues, donde quiera que estés, estarás con nosotros, echándonos una mano solidaria en esta tarea de hacer patria.
La patria que es América.
Este pasaporte es para eso. Si tu eres cubano y eres bolivariano, ya eres venezolano de corazón.
Y estamos juntos en el mismo lado, el único posible o, en todo caso, el único aceptable. Estamos en el lado de la gran humanidad que ha dicho basta y ha echado a andar[5].
De esta forma, el libro recorre un camino hacia el entendimiento de la Revolución Bolivariana de Venezuela, o al menos, evidencia las razones por las que él defiende con fervor dichos ideales basados en los valores principales que tiene esta Revolución: el respeto a la diversidad, la pasión por la justicia, la sensibilidad social, la predilección por la verdad, la conciencia colectiva, entre otros, que no solo deben definir el pensamiento chavista, sino que deberían estar presentes en todas la revoluciones sociales que predican la defensa de los derechos del pueblo.
Francisco Sesto Novás, Farruco, nació en España en 1943. Es arquitecto, escritor, poeta, ensayista —con obras premiadas en Venezuela— pintor, columnista de prensa y profesor jubilado de la Universidad Central de Venezuela. Durante su carrera se ha desempeñado como Director de la Oficina de los Centros Históricos del Estado Bolívar, Director de la Oficina Local de Planeamiento Urbano, Director General del Despacho y Director de Gestión Urbana de la Alcaldía de Caracas. Fue miembro del Consejo Directivo de Fundapatrimonio y de la Junta Administradora de Fundacaracas. Su obre literaria comprende, entre otros: Isolda (1990), Una pasión (1990), Libro de la luna interior: Poemas 1967-1995 (1995), Desnudo el tuyo tan hermoso y para nosotros necesario (1997), Fatigas y fulgores (2003), ¿Por qué soy chavista? (2002).
Comentarios