Como colofón de una de las campañas electorales más violentas de la historia reciente, la noticia desde México es la victoria electoral de Andrés Manuel López Obrador, quien confirmó aquella frase del refranero popular: a la tercera va la vencida.

López Obrador, de 64 años, logró un 53% de los votos, con ventaja de más de veinte puntos porcentuales sobre el candidato que le secundó en el resultado final.

Desde septiembre en el país latinoamericano han ocurrido casi 150 asesinatos políticos. La cifra de por sí es alarmante, así como lo es el hecho que 48 de las víctimas eran precandidatos o candidatos a cargos políticos.

En un proceso electoral en el que su principal rival, Ricardo Anaya, era la figura que representaba la coalición entre el PAN, el PRD y Movimiento Ciudadano; la victoria de López Obrador, un candidato antisistema y por ende más alineado a la izquierda, podría significar un importante cambio para el país.  

El movimiento de AMLO ganó la Ciudad de México y otras importantes gobernaciones —cinco de nueve—, en un proceso en el que alrededor de 18 mil puestos —entre gobernadores, alcaldes, senadores y diputados— estaban en disputa.

Este triunfo modifica definitivamente el mapa político mexicano. Sin dejar de mencionar que en la importante Ciudad de México quien fungirá en la alcaldía es una mujer de la coalición que encabeza AMLO: Claudia Sheinbaum. Resultados electorales que provocan cambios importantes que traen esperanza y nuevas luces a la nación.