La conspiración en Chile contra la Unidad Popular y el presidente Salvador Allende, que finalizó con el golpe militar del 11 de septiembre de 1973 y los restantes 17 años de dictadura, tuvo como motivación y base principal, por una parte, la guerra del imperialismo contra la vía pacífica al socialismo y, a su vez, la implantación del neoliberalismo en América Latina.

No hay que perseguir la unidad por la unidad, sino la unidad para la revolución[1].

Nicolás García Moreno

El autor-compilador del libro La conspiración contra Allende —Juan Jorge Faundes, bajo el sello editorial de Ocean Sur—, argumenta la pertinencia del libro, esperando que los lectores encuentren en él, la resolución a las siguientes interrogantes:

¿Qué hacer para fortalecer el Atractor Bolivariano, neutralizar los ataques que desde los distintos ángulos lanza el Atractor USA-Coorporaciones Mundiales y en definitiva sostener y desarrollar una democracia participativa en lo político, plurinacional, donde sea pertinente, y que asegure, una redistribución social y equitativa de la plusvalía, con énfasis en la salud, la vivienda, la educación y la previsión, sin importar que se llame Socialismo del Siglo XXI, capitalismo social o de otro modo, y con sus peculiaridades, a la chilena, a la boliviana, a la ecuatoriana, etc.?  

¿De que manera la experiencia de los ocurrido en Chile entre 1970-1973 nos sirve hoy para desenmascarar, contrarrestar y derrotar las actuales campañas de desastibilización?.[2]

El libro ofrece una entrevista al periodista Manuel Cabieses, quien fue prisionero de guerra en Chile. Según sus propias anécdotas, estuvo diez años pasando desapercibido durante la dictadura y militando en la resistencia como dirigente del Movimiento de Izquierda Revolucionario (MIR). El texto complementa el testimonio de dicho periodista con una selección de artículos publicados en 1973 en la revista Punto Final,[3] de la cual fue redactor y director Cabieses, y que circuló, además, con la intención de reforzar el alma antifacista de los pueblos de Latinoamérica.   

Cabieses explica en qué momento comienza el golpe de Estado y habla sobre la tensión que vivía el pueblo chileno durante esos días pues señala que: «sabíamos que vendría el golpe, pero no cuándo ni cómo… ni que era un golpe militar».[4] El hecho comenzó con el bombardeo a La Moneda por los militares o carabineros, como son conocidos en Chile.  Los testimonios del periodista no solo se reducen a los sucesos de guerra, sino que incluye opiniones sobre el manejo periodístico de la información y las especulaciones sobre el inicio de la conspiración en la Casa Blanca.

Lo cierto es que en una revista uno debe pronunciarse, protestar, manifestarse en contra o a favor de algo, cada quince días, una semana, tres días o un mes —según la frecuencia de publicación— en una revista uno no puede quedarse callado, se analiza, dialoga y discute con el lector; mientras que un partido político es menos “practico”, es decir, tiene unas bases, intenciones, pero no está en constante diálogo con las personas, de ahí que, si se asocia un partido a una revista, ya esto sería hacer el trabajo completo y bien hecho, sin embargo, Cabieses explica que, aunque asociaron muchas veces Punto Final con el MIR, no existía ninguna relación directa, lo más estrecha que fue dicha unión fue en sus tiempos finales antes del golpe, donde las líneas de discurso de ambas instituciones eran bastante coincidentes.

Lo expuesto por Manuel Cabieses en la primera parte del libro se corrobora con el resumen de textos que se presenta seguido de la entrevista. En la misma se presentan textos que advierten el advenimiento de un golpe militar, aunque nunca se pensó que sería con tanta fuerza. Asimismo, en la mayoría de los artículos del propio Cabieses, se llama a la unión revolucionaria de los explotados y a continuar la lucha por el socialismo; se incluyen «lecciones» de marxismo-leninismo y referencias al materialismo dialéctico como enseñanzas para la construcción del socialismo en Chile y se explica cómo, aun cuando este proceso ha sido particular en dicho país, cumple con las bases de todas las revoluciones. De esta manera, el libro se convierte en una excelente guía del proceso revolucionario en Chile durante la época mencionada con testimonios verídicos sobre dichos sucesos.