En cumplimiento de la convocatoria realizada por la revista Contexto Latinoamericano, el jurado, que analizó las obras entre el 20 de junio y el 20 de julio, arribó a las siguientes conclusiones:
Las obras en concurso se ubican mayormente en tres bloques temáticos. Uno estuvo vinculado directamente a hechos trascendentales de la gesta revolucionaria que triunfó en 1959 y los sucesos ocurridos en los primeros años del proceso, la guerra en la Sierra Maestra, la lucha clandestina, los Órganos de la Seguridad del Estado, la lucha contra bandidos, la invasión por Playa Girón.
Otro grupo de textos en competencia reflejaban valores fundamentales, que bien podrían ser sinónimos de la Revolución Cubana, la práctica de la solidaridad y el internacionalismo.
Por último, un tercer conjunto, guarda relación con historias de héroes más cotidianos, seres humanos que no aparecen en los libros de historia y desafortunadamente, tampoco en los diarios, personas menos referenciadas y menos visibilizadas, a quienes también les debemos muchas entrevistas, concursos, homenajes, porque desde el anonimato, desde la humildad, han echado su suerte con la Revolución Cubana y al mismo tiempo, son el principal testimonio de los impactos de un proceso esencialmente humano.
En función de lo anterior, decidimos otorgar:
PREMIO a:
· Flor carbonera, de Yunet López Ricardo y Wilmer Rodríguez Fernández.
Un excelente texto que logra, partiendo de un personaje y una historia muy conocidos en Cuba, siluetear un retrato conmovedor. Bien redactado, con oficio periodístico y lirismo. Sin caer en la loa burda del discurso mediático oficial, ni repetir los que ya se han vuelto lugares comunes de la historia de esta mujer. En el relato se siente y se vibra con el ambiente descrito. Sus autores nos hacen vivir, con pinceles literarios, el entorno de esa vida revolucionaria de Nemesia Rodríguez Montano. Vale por la historia que cuenta y vale por cómo se cuenta.
PRIMERA MENCIÓN a:
· Lo que verdaderamente falta, de Carla Valdés León.
Por acercarnos a una de las contribuciones más hermosas de la Revolución Cubana: ser la patria de hermanos y hermanas de lucha que vinieron a Cuba no solo a refugiarse, sino a soñar y construir, desde aquí, la emancipación de sus pueblos. Por presentarnos a Aida, quien salvaguardó la obra de Roque Dalton y optó por vivir en Cuba. Muy creativa, la más singular del conjunto en cuanto a construcción periodística.
SEGUNDA MENCIÓN a:
· Armando Miguel: «¿Cómo vivir lejos de mi historia?», de Dainerys Mesa Padrón.
Por la selección del entrevistado, un campesino que desde su vida en un mismo municipio cubano, resume la obra revolucionaria de Cuba. Por ser un texto diáfano y cercano, como uno imagina al protagonista. Una buena historia, atractiva y bien escrita, que no cae en lugares comunes.
Otras obras que resultaron finalistas, sin orden de preferencia, fueron:
· Raúl Suárez: un pastor en Revolución, de Laura Suárez Ferrera, Anabel Lario y Annette Espalter.
· Más allá de las fronteras… los valores, de Liliam Tápanes Bella.
· El lobo del carbón, de Meliza Rodríguez Martínez.
· Cuba no adoctrina: orienta, y uno elige, de José Antonio Calderón.
· Gladys cuenta el pasado para vivir futuros, de Damaris Hernández Marí.
Recomendamos se publiquen estas entrevistas en próximos números de la revista. De forma general el concurso logró aunar varias historias de elevada factura, tanto por lo singular del relato como por la calidad estilística de la redacción. Los textos recibidos permiten descubrir la existencia de una potente voz juvenil que escarba con originalidad y frescura en la historia de Cuba.
Consideramos muy loable la iniciativa de OCEAN SUR. Los exhortamos a que se repita y diversifique, abordando temas, espacios y objetivos que enriquezcan la producción periodística de Cuba y de América Latina.
26 de julio de 2018
Tamara Roselló / Walter Raudales / Jorge Enrique Botero / Jesús Arencibia
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