Contrapunteo

Brasil padece del mal Bolsonaro

30 ene. 2020
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Un titular llamó poderosamente mi atención, el mismo enunciaba Bolsonaro y el hambre, como una dupla indisoluble en los tiempos del Brasil actual, ese que dista en muchos aspectos de la nación legada por el Partido de los Trabajadores (PT) y los expresidentes Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff.

Este año que recién culminó los datos fueron contundentes demostrando que el gigante suramericano experimentó una disminución del nivel de vida entre las clases más desfavorecidas, con 104 millones de personas percibiendo bajos ingresos mensuales, de acuerdo con un reporte de Prensa Latina.

Pero esta lamentable situación para la gran mayoría no inició en el 2019, durante el 2018, la pobreza extrema en Brasil alcanzó su mayor cifra desde 2012, con el 6,5% de la población, equivalente a 13,5 millones de personas.

Según Telesur, la cantidad de personas con un bajo nivel adquisitivo durante la gestión de Bolsonaro, contrasta con las registradas en 2014, durante el Gobierno de Dilma Rousseff, cuando fue la más baja con el 4,5%. 

Por si fuera poco, los más poderosos lograron ratificar su posición hegemónica dentro de esa sociedad, mucho más clasista que en tiempos pasados.

Investigaciones demostraron que el 1% más rico de esa nación tuvo una renta mensual media de 27.744 reales (6.800 dólares), mientras que el 50 por ciento de la población obtuvo solo 820 reales (200 dólares). 

¿Y qué hace Bolsonaro al respecto?

Mientras su pueblo se encuentra en uno de sus momentos económicos de mayor precariedad, Jair se ha dedicado, además de enfrentarse a la justicia por cargos de corrupción, a  criticar fuertemente gobiernos como el de Cuba y Venezuela por una supuesta falta de democracia.

También ha ampliado y fortalecido los lazos con su par estadounidense Donald Trump, otro mandatario cortado por la misma tijera que Bolsonaro, sin escrúpulos ni respeto por la verdadera soberanía de las naciones.

Durante la reunión de la Coordinación Nacional del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva hizo énfasis en las desaciertos del Jefe de Estado brasileño el cual «no está respetando ningún derecho social. Desafortunadamente, tengo 74 años y tendré que hablar nuevamente. Porque si tenemos miedo, seremos eliminados. Tenemos que levantar la cabeza y la cara».

La intervención del líder del PT, también hizo referencia al duro momento económico que atraviesan los sectores más empobrecidos, como los trabajadores del MST, los cuales han tenido que vivir perseguidos por órdenes de su presidente.

En contexto:

-1 de cada 3 niños en Brasil viven en la pobreza.

-Alrededor del 49,4% de la población de niñas negras o mestizas viven en lugares sin saneamiento básico.

-Un 28,4% de las familias con menores de hasta 6 años viven en la pobreza.

-1 millón 500 mil niños viven en hogares en los cuales los ingresos no superan al mes los 37 dólares.

Fuente: VIII Simposio Internacional de Desarrollo de la Primera Infancia.  

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